El Congreso ha acelerado la tramitación de la Ley de Vivienda y, tras el acuerdo alcanzado por el Gobierno de coalición con ERC y Bildu, ha fijado un calendario con idea de aprobar el texto este jueves en comisión, la próxima semana en el Pleno y después de urgencia al Senado con idea de que esté en vigor antes de las elecciones autonómicas y municipales del próximo 28 de mayo.
Este martes, la Ponencia ha aprobado su informe de la ley con el apoyo del PSOE, Unidas Podemos, Esquerra Republicana (ERC) y Bildu. En una reunión a puerta cerrada se han introducido 44 enmiendas transaccionales que los partidos del Gobierno han negociado con sus aliados, pero también con Junts, el PNV, el PP y el PDeCAT.
El siguiente paso será el debate del proyecto en la Comisión de Transportes, que ha quedado fijado para este mismo jueves, y después el dictamen se elevará al Pleno del Congreso, donde se votará el día 27, según ha dejado ya fijado la Junta de Portavoces.
De ahí pasará al Senado y, según ha explicado el portavoz del Grupo Socialista, Patxi López, el objetivo es que en la Cámara Alta se aceleren los trabajos con idea de que se apruebe en el primer Pleno de mayo para que la nueva ley esté en vigor antes incluso de la campaña de las elecciones municipales y autonómicas del 28M.
En estos días, el PSOE está dispuesto a negociar algunas enmiendas adicionales relativas a la regulación de pisos turísticos, aunque López no ha ofrecido detalles sobre los grupos proponentes de estas enmiendas, defendiendo lo que considera una negociación "discreta".
La aceleración de la tramitación de la ley, que llevaba más de un año bloqueada en la Cámara y ahora se va a aprobar en menos de 10 días, ha suscitado críticas en partidos como el PNV y Ciudadanos.
"Nadie puede decir que esto es una tramitación habitual", ha comentado el nacionalista Aitor Esteban, quien considera que "una ley de este calibre merecería un poquito más de reposo".
El portavoz de Ciudadanos, Edmundo Bal, ha indicado que su grupo pidió celebrar una segunda reunión de ponencia, pero la mayoría en torno al Gobierno se negó. En este contexto, el parido naranja intentará frenar la tramitación y este jueves propondrá que la Comisión de Transportes y Vivienda vote una por una las cerca de 500 enmiendas vivas al texto para protestar por la urgencia de la tramitación en víspera de elecciones.